Hasta el mas fuerte y duro guerrero necesita liberar sus emociones! Se Hombre!
Con el correr de los años, la vida de un hombre se ve cada vez mas encasillada a cerrar sus emociones, por miedo a ser destruido por su entorno, por miedo a perder el respeto de la gente que conoce, y miles de supuestos que ocurren en nuestra mente de manera de peliculas.
Pero la verdad es que seguis siendo un humano que siente, que sangra, que puede estar triste, puede enojarse, puede sentir las emociones. El problema es que nadie nos enseña a liberarlas de una manera correcta y entramos en un juego de a todo o nada, libero en extremo o me cierro. Muchas veces hemos visto y escuchado a una figura paterna, tutor, o alguien a quien admiramos que nos ha dicho "Tenes que ser fuerte, los hombres no se quejan, los hombres no lloran", se que esa persona quiso tener un buen gesto con vos, solo que lamentablemente es un tema para profundizar mucho.
Ser fuerte puede ser tomado de muchas maneras, pero todo tiene que tener un perfecto equilibrio. Se trata de soportar y de liberar, se trata de permitirte desahogarte de las emociones que llenan tu pecho, soltarlas, liberarte de esa carga que sentís en tus hombros, ese cansancio y frustración.
Solo que no hayq ue sucumbir antes las emociones, no pelear contra ellas, y acá entramos en la parte que ningún hombre quiere reconocer. Creeme y te voy a entender, porque para mi tampoco es fácil aceptarlo, pero es así. No tenés que poder con todo, podes fallar, equivocarte, sentir ganas de parar, frustrarte, no saber algo, estar triste, sentirte mal, sos humano no un robot y necesito que lo sepas muy bien, no es no de decir "si ya se" y seguir con la rutina de siempre, se trata de ser consiente de que esta bien solo por un momento llorar, frustrarte, no tener ganas de nada, es valido siendo humano y lo sos.
Cuando fue que pudiste estar en contacto que tu yo de niño ¿Como esta el? ¿Tiene la misma sonrisa? ¿Ríe como antes? ¿Tiene miedo o esta esperandote para que lo abraces? Olvida de lo que te han dicho y permitite pensar en vos, imagínalo a ese niño interior tuyo, velo como su fuese un hijo, ¿que necesita para que este feliz?. Cuando fue la ultima vez que pensaste en el, vamos a darnos un tiempo en hablar con el, y si llega mirándonos a los ojos a través de un espejo. El no se fue sigue estando ahí, solo tenés que encontrarlo.
Te dejo con una carta que le escribí a mi niño interior, con la promesa que vas a sentir que se moviliza tu niño interior para que lo encuentres, y espero que ese reencuentro sea el comienzo de un hombre mucho mas fuerte, mucho mas duro, mas rudo, porque solo sintiendo nuestras emociones somos mucho mas fuertes!
💌 Carta a mi niño interior
Hola, mi pequeño amor…
Hoy quiero pedirte perdón.
Perdón por olvidarme de vos.
Por no haberte cuidado como merecías.
Por haberme endurecido tanto, al punto de no escucharte cuando más necesitabas hablar.
Perdón por perder esa sonrisa tuya tan pura,
esa alegría simple que venía solo con estar vivo,
con sentirte amado, abrazado, sostenido por mamá y papá.
Te fallé siendo exigente, queriendo que seas fuerte todo el tiempo,
cuando en realidad solo querías jugar, reír, llorar, ser libre.
Perdón por hacerte aguantar más de lo que podías,
por hacer silencio cuando lo que necesitabas era gritar,
por esconder las lágrimas cuando lo que necesitabas era llorar sin miedo.
Me desconecté de vos…
pero no porque no te amara.
Sino porque el mundo me hizo creer que sentir era un error,
que mostrarte era peligroso.
Y hoy lo entiendo.
Y hoy estoy acá para vos.
Desde ahora, te prometo que voy a escucharte.
Te prometo que voy a darte el tiempo para sentir,
para pedir lo que necesitas,
para ser feliz de nuevo.
No quiero que sigas solo allá adentro.
Quiero que salgas.
Quiero abrazarte todos los días.
Quiero verte volver a sonreír, sin tener que defenderte de todo.
Gracias por esperarme.
Gracias por seguir amándome, aún cuando yo me olvidé.
Ahora sí: vamos juntos.
Con todo mi corazón,
Emmanuel.....
Escrito por Emanuel Rodríguez
Fundador del Instituto Kallu, músico y apasionado por el aprendizaje.
Comodoro Rivadavia, Chubut – Argentina.
Comentarios
Publicar un comentario